Las uñas de los pies tienen un color naturalmente blanco, pero en ocasiones el esmalte de las uñas sufre decoloraciones presentando un aspecto negro muy llamativo. Lo que conocemos popularmente como “uñas negras” pueden ser causa de deficiencias nutricionales, infecciones o traumatismos. A priori, no es una lesión que deba preocuparnos en exceso, pero si la uña no mejora en los plazos habituales deberemos consultar con un médico para descartar causas más graves.

Como decíamos, el origen de las uñas negras puede tener varios factores. Si fuese un origen médico podría ser indicio de una anemia, una diabetes e incluso alguna patología renal o cardíaca; pero es mucho más frecuente que la uña negra sea consecuencia de una infección fúngica o, más aún, de un hematoma subungueal.

Este último caso es el que sufren muchos corredores después de participar en carreras de larga distancia o pruebas de trail running. El color negro de la uña es fruto de los microtraumatismos sufridos en los dedos; es decir, de la acumulación de sangre en esa zona. Suele ocurrir como resultado de la falta de espacio de los dedos para moverse libremente en la zapatilla deportiva, lo que a su vez provoca que la parte delantera de los dedos e incluso las propias uñas golpeen con la pared de la zapatilla, provocando al cabo de los kilómetros esas roturas de los vasos sanguíneos y la posterior uña negra.

En la mayoría de casos esta uña negra (cuyo color al principio puede ser rojizo e incluso amarillento antes de llegar a negro) se desprenderá de manera natural y no necesitará tratamiento; pero la situación puede complicarse si antes de caer empieza a crecer una nueva uña por debajo de la uña negra. Los tiempos para que se produzca este proceso suelen ser largos; hablamos de varios meses en muchos casos e incluso hasta un año.

Si sufrimos dolores regularmente o vemos que el desprendimiento de la uña se produce de manera parcial (y no total), lo ideal es acudir a un podólogo que analice su estado y nos ofrezca una solución. También debemos visitar al podólogo si la uña negra es consecuencia de alguna infección y no provocada por el calzado o el deporte. Existen ungüentos o cremas que son muy efectivas.

Para prevenir la aparición de uñas negras, os daremos unos consejos: utiliza calcetines deportivos de calidad, con tejidos que eviten deslizamientos dentro de la zapatilla y cuente con protecciones en la zona delantera de los dedos; si vas a comprar una zapatilla deportiva, elige mejor la que te dé algo más de aire en la parte delantera (mejor media talla más que una talla que nos quede justa: ten en cuenta que en verano los pies se dilatan por el calor, así como durante la actividad física) y si eres corredor de trail running, es probable que necesites hasta 2/3 y una talla más de la normal en muchos modelos de zapatillas. Por último, si eres propenso a sufrir uñas negras, coloca protectores de uñas en los dedos (fabricados con gel de silicona que contiene propiedas viscoelásticas previniendo la formación de uñas negras o encarnadas).